domingo, 3 de enero de 2010

Sueño VI

En mi primera vocación he fracasado
ojal sin remiendo,
astuta loba en la intemperie de la trampa
movimiento repetido sin usar ninguna enseñanza.

La vida se ha de inventar de noche
con la luz tenue
en un sombrero calado de lluvia.
La vida pesa lo mismo que la arena desaparecida en un puño cerrado.
La vida, como un caballo de marchas desgastadas.

8 comentarios:

  1. He venido a continuar el deleite de esta saga de poemas tuyos, y me he deleitado una vez más.
    Dejo besos, feliz año, feliz vida.

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  2. Que bueno volver y encontrarse con uno de tus fantásticos "sueños" a los que uno se va haciendo adicto. Me encantó el verso "La vida pesa lo mismo que la arena desaparecida en un puño cerrado". Como siempre, tu poema me deja un regusto mágico y misterioso que me cala hasta los huesos. Yo llevo mi sobrero "enlluviado", como digo yo aunque esté mal dicho, desde que nací. Un abrazo, la sigo leyendo. Feliz año nuevo.

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  3. Vertiente pura y cristalina de fluyentes sentimientos.

    Un abrazo Cordial.

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  4. Querido Navegante, me alegra encontrarte entre los sueños, te deseo un feliz año 2010.

    Te sigo leyendo.

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  5. Gracias Univocidad, por tu verso como una hermosa puerta de entrada para el diálogo, un abrazo.

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  6. Compañero Utopía, aquí estamos de nuevo, enlluviados con y sin sombrero, es un gusto leerte en tu Hermosa Utopía, un abrazo.

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  7. me gusta la "mecanicidad" de tu sueño, su caballo de marchas desgastadas...

    felicidades por el blog. si me permites el atrevimiento, te he añadido a mi lista de enlaces recomendados.

    un beso.

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  8. Gracias Andrés, por este reencuentro en el calendario y por el enlace, me alegran tus palabras.

    Un beso y hasta pronto.

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