También los caminos mueren como los hombres, en silencio, o de pronto se rompen.
Yehuda Amijai.
Busco vivir las edades que mis ojos no recuerdan.
La fuerza se apelmaza en derredor,
me retiene para no fugarme al vacío suspendido en el viento.
No podré ser feliz donde mi mano resiste y no abandona.
Tras de mí, las sacudidas van cediendo a la helada y su embestida.
Escojo la delicadeza, el instante vencido, sin escaramuzas,
la loba seguirá hambrienta en las montañas.
Elena Conchello.
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preciosoo si señorrr muyy bonitoo!!!
ResponderEliminarun beso
josue segui
Qué sorpresa Josué por aquí, te gusta la poesía...ya me lo decía yo, con esa forma de interpretar a Satie... Un abrazo, serás siempre bien recibido en este rincón. Besos.
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