domingo, 21 de marzo de 2010
Sueño XIV (Día de la Poesía)
Donde mi naturaleza se detiene a ensayar
el sigilo de las manos muertas,
tengo frío.
Me acuesto con pieles sepultadas
y mis médulas se convierten en témpanos de vidrios.
Me romperé en la madrugada
cuando repare el delito en mis venas.
Me romperé amor, en la carne humana
con el vértigo de puntillas
palpitando de deseo.
Afronto el encarnado tinte de la tarde
y los espejismos grabados de fantasmas.
En el recodo de este jardín tienes,
néctares, aromas extenuados
como caen los besos de un muerto.
Cartas de un esfuerzo entregado
y secretos verdugos.
Rompo el cautiverio de tu regazo
y me desabrocho el vestido
mientras te toco en un idioma de manos pequeñas.
Elena Conchello.
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[... como se a tinta da letra em poema, pudesse tornar-se um pouco da nossa própria carne]
ResponderEliminarum imenso abraço,
em poesia, Elena
Leonardo B.
Un gran poema que he disfrutado con varias relecturas. Las imágenes, preciosas.
ResponderEliminarSaludos.
...qué espoesia?!...
ResponderEliminarsalud!
Crecer siempre es romper un cautiverio; desabrochar. Impacta ese final de manos pequeñas.
ResponderEliminarsaludos desde bs as.
Estuve aquí ayer y volví hoy. Después de leer esto parece un poco tonto comentar. Volveré a lerlo más veces. Un abrazo, amiga.
ResponderEliminarSon minutos preñados de rubor y deseo
ResponderEliminarLa fértil dureza vislumbra los fronterizoa óleos
Separados solo por una ficción
Que alguien, sabio, anidó
Como propuesta, Invitación, trazo,
Casi adicción,
de azarosa piel , adicción.
Entonces tus pestañas se convierten en patria
Tus pupilas en elegante destino
Tu aroma en alimento de huérfano
Tu presencia, bálsamo cosido a mis cicatrices.
Casi feliz sollozo.
De quién buscó el secreto de la máscara invisible
Y encontró alguien que no necesita esconderse.
Si no te importa, me gustaría que mi próxima entrada en Arte y Poesía fuese este poema con una pintura mía. Un abrazo. No es que lo entienda bien...es que me gusta, me parece muy bueno...
ResponderEliminarMagnífica idea, estos poemas son materia viva, lenta artesanía, no encuentro otro lugar mejor que con tus creaciones, te lo agradecerán eternamente la poesía y mi persona.
ResponderEliminarUn beso, Mateo.
Tejido en el abdomen como cuerpo extraño.
ResponderEliminarNaturaleza muerta en el temblor del suspiro.
Reserva y sonrisa
y una corriente de
párpados estremecidos.
Después lo que pasó, lo ignoro,
sólo sé que me escondí
y no pude alejarme de la orilla,
de un oleaje embravecido
en la ráfaga violenta del instante.
Arremetida me envolví en tejidos,
ropajes transparentes
sentí frío toda la noche,
arderían mis palmas
si no te encontraba en las formas plurales
de mis labios, en el desliz de una fortuna.
Atrapado y mudo, te deshice en mi boca.
Bienvenido Néstor, qué buena la apreciación sobre el crecimiento y el paso del tiempo; "Crecer siempre es romper un cautiverio; desabrochar"
ResponderEliminarEs curioso la primera entrada que hice en este blog, fue con un poema titulado, Y desabrocharme, la palabra gesta más vástagos...un abrazo, hasta pronto.
Hola, Casa de Poesía, Poesía es la casa del ser, un beso.
ResponderEliminarJosé Antonio, agradadecida por tus palabras, aquí seguimos a la caza de visiones, al escrutinio del sueño.
ResponderEliminarUn beso.
Leonardo, sobre lo que apuntabas, me hizo pensar que el lenguaje nos hace una piel de tacto diferente, las palabras nos dan cuerpo, nos increpan una búsqueda.
ResponderEliminarGracias,compañero.
Metáforas certeras dentro de una poética cuyos hallazgos nos remiten a la vena confesional del surrealismo.
ResponderEliminarTe linkeo.
Saludos...
Elena...
ResponderEliminarsiempre un gusto saludar a alguien que arriba a mis letras y me da la oportunidad de conocer su casa... gracias!!!
me empapo en tus letras amiga!!!
hermosos días!!!
beso!!!
Bienvenido Jorge, gracias por abandonarte en este rincón, ventana creativa para el ojo que la habita.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias Ursula, por encontrarme y por quedarte, es un placer tenerte entre mis compañeros y lecturas poéticas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Si el poema es bueno, el final es sensacional. Me encantó leerte.
ResponderEliminarUn beso y hasta pronto
Hola Elena,
ResponderEliminarQué bello sueño y que belleza escribirlo. tiene una fuerza extenuante.
Especialmente me quedé prendada con:
"Me acuesto con pieles sepultadas
y mis médulas se convierten en témpanos de vidrios.
Me romperé en la madrugada
cuando repare el delito en mis venas.
Me romperé amor, en la carne humana
con el vértigo de puntillas
palpitando de deseo".
Precioso.
Bss
Mónica
Hola Carlos, bienvenido, estuve por tus páginas, buceando, me quedé leyéndote... un beso, y hasta pronto.
ResponderEliminarGracias Mónica, un placer tenerte aquí hoy, gracias por tu lectura, sigamos creando belleza...un abrazo, linda.
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