domingo, 31 de julio de 2011

Sueño XXXI

Quedar despierta en las iniciales
absorber una pequeña porción de agua.

Quedarse quieta.
Beber sin miedo del hedor peligroso de los huesos.

No precisar cuándo.
No precisar.

Acogerme a este descanso
a esta engañosa elucubración del tiempo.

¿Y ella?

Ella sigue atrapada
entumecida por la luz
acobardada para el futuro.

A veces es lo perdido
lo indefinido que me rodea
y no recuerdo su nombre
no recuerdo sus símbolos.

Y busco en la carne su inclinación
y no repetirla
y servirla con mi propia vida.


Elena Conchello.

viernes, 8 de julio de 2011

Sueño XXX

La vida se vengaba de mí.
Y la venganza consistía sólo en regresar.Nada más.

Clarice Lispector



Hablas, me hablas.

No es fortuito.

Es seguro.


Me dices

cosas que escuchan mis otras cosas que no son yo;

mi mutismo, mi miedo, mis huesos congelados.


Hablas.

No son tonterías.

Aunque mi dolor les niegue su verdad inmediata.


Has dicho

que si no escribieras

no escucharía la acuosidad de tu sonrisa en mis oídos,

tu esperanza sin nombrarla como arquetipo.


Lo has dicho;

escribir algún día alcanzará a mis otras palabras

aquellas que no fueron del todo mías.


Ahora estoy segura.

Solo lo había dejado tartamudo,

el poema,

cabizbajo y vagabundo.


Elena Conchello.